Saloufest, icona del turisme de qualitat
El Saloufest ha arribat a la quinzena edició enguany. Ja són 15 anys de posar Salou en el mapa del turisme de qualitat, sostenible com pocs i respectuós amb el medi i el veïnatge. Les notícies puntuals dexcessos etílics i sexuals són cosa de quatre mitjans de desinformació aixafaguitarres, envejosos de constatar com la capital de la Costa Daurada ja senyoreja el rècord de tres lustres acollint milers duniversitaris britànics. Canalla delerosa de fer llargues cues per visitar la Tàrraco romana i omplir dotzenes dautocars per meravellar-se de les reials tombes de Poblet. Cellers del Priorat han de penjar el rètol de complet perquè aquesta jovenalla està assedegada per tastar uns vins de qualitat i poder oblidar lalcohol de garrafa. I sobretot, els 5 milions deuros que deixen al calaix fan de molt bon aprofitar.
Certament Saloufest sha hagut de fer un lloc, a base desforç i colzes de barra de bar, per acreditar-se com un esdeveniment ludicoesportiu de primer nivell, al costat de la Setmana Santa de la Catalunya Sud, farcida dactes emblemàtics. Les Tres Gràcies de Reus, la Processó del Sant Enterrament de Tarragona, la Passió dUlldecona, el solemne Viacrucis de la Selva del Camp o la Processó del Diumenge de Rams de Tortosa són esdeveniments carregats de tradició.
Doncs bé, aquests turbes duniversitaris cridaners de la Gran Bretanya que es pixen per les cantonades i que gaudeixen dun estat constant dembriaguesa poden esdevenir també una nova tradició que enriquirà el nostre patrimoni turístic. El rotatiu madrileny El País ja albirava la potencialitat del macroesdeveniment en una impagable crònica de Mercè Pérez del dia 12 dabril de lany 2011:
«Me he bebido 25 copas entre cervezas, chupitos y ron, esto va a ser una maratón de alcohol». Lo decía ayer a medianoche Danie, un joven de 19 años que estudia empresariales y que apenas podía sostenerse en pie. Es uno de los 5.000 universitarios ingleses y escoceses que participan hasta el día 15 de abril en la décima edición del Saloufest, un evento que se promociona como un certamen deportivo entre universidades y que en su jornada inaugural desembocó en una juerga de alcohol por las calles de Salou. Daniel llegó a la Costa Dorada tras 24 horas de viaje en autobús y con una idea bien clara «¿Deportes? No, gracias, quiero fiestas, chicas y alcohol» [...] Le rodearon hasta altas horas de la madrugada manadas de universitarios disfrazados de trogloditas, marineros o enfermeras «Soy nadador, pero no tenemos equipo, así que vamos a estar todo el día en la playa y seguiremos bebiendo para no perder el ritmo, es el segundo año que vengo al Saloufest y es alucinante», afirmaba entre contorneos Nik Marsh, un estudiante de negocios de la universidad Portsmouth disfrazado de mimo. Otros, como James, estudiante de criminología de 20 años, no lo tendrán tan fácil. «A las 8 de la mañana tengo que despertarme para jugar un partido de futbol, y si no nos levantamos la organización nos llama por teléfono y nos obligan a salir de la cama, el año pasado nos dormíamos en el banquillo, íbamos a las competiciones borrachos y algunos incluso vomitaron». Para él, la clave del éxito de estas vacaciones es la permisividad: «Nosotros llevamos dinero y la ciudad nos lo permite todo, el interés es mutuo», afirmó divertido [...] A medianoche, la mayoría ya a medio vestir, hicieron un parón en algún restaurante de comida rápida. «El Saloufest es nuestro agosto adelantado, nos da igual que den mala imagen», explicó el empleado de uno de los locales. Hacia las dos de la madrugada, muchos deambulaban por las calles perdidos, buscando su hotel. Alguno incluso se dedicó a hacer carreras por la acera completamente desnudo o a saltar las paredes de las casas en busca de alguna piscina en la que colarse. A otros les habían robado el móvil o la cartera. Y la mayoría seguía con ganas de fiesta. «Cada noche terminamos desnudos bañándonos en la playa» comentó entre sorbos de vodka y vestida de bailarina de ballet Mary, de 19 años. Esta noche, los 5.000 universitarios de Saloufest volverán a disfrazarse y a tomar las calles de la ciudad de la Costa Daurada. «¡Esto es el paraíso!», acertó a gritar Mary mientras se alejaba dando tumbos.*
Llegint la crònica, hom coincideix al cent per cent amb la ràbia que ja va manifestar el regidor de Turisme de lAjuntament, Alberto del Hierro, quan va desmentir categòricament que el Saloufest fos turisme etílic. La pàgina web de lAjuntament de Salou del 10 de març de 2010 mostra aquesta perla: «parece que haya una mano negra detrás de todo ello que intente hacer daño a la buena labor que se está desarrollando desde el sector turístico de Salou». Además, ha recordado que desde hace seis años Salou cuenta con un sello de turismo familiar bien avalado y que «por suerte, hace muchos años que Salou ya no se asocia al turismo de borrachera».**
La malastrugança del recent Saloufest: una noia de 21 anys en estat molt greu després de caure del balcó dun quart pis de lhotel i loverbooking detectat en alguns dels establiments, pot trabucar els titànics esforços de ladministració local en consolidar aquesta referència del turisme de qualitat.
Sembla que el senyor Pere Granados, actual batlle de Salou, sha deixat influir per quatre notícies alarmistes i vol ara deslligar el nom de Salou de qualsevol relació amb la farra alcohòlica continuada de 15 anys. LAjuntament ha publicat un comunicat en què diu: El Ayuntamiento de Salou requiere en los hoteles que participan del paquete turístico que dejen de perjudicar la buena imagen turística del municipio y que cesen en el uso de la marca Salou.***
Potser ara caldria recordar a les nostres competents (sic) autoritats allò tan nostrat de qui no vol pols que no vagi a lera.
*http://sociedad.elpais.com/sociedad/2011/04/11/actualidad/1302472807_850215.html
**http://www.salou.cat/notespremsa_detall/_dUwgE6vd29Tm5OISSHwQvAGk2Vzb6BEBW6pVhEZyfGY
***http://ccaa.elpais.com/ccaa/2015/04/02/catalunya/1427981361_881393.html
Certament Saloufest sha hagut de fer un lloc, a base desforç i colzes de barra de bar, per acreditar-se com un esdeveniment ludicoesportiu de primer nivell, al costat de la Setmana Santa de la Catalunya Sud, farcida dactes emblemàtics. Les Tres Gràcies de Reus, la Processó del Sant Enterrament de Tarragona, la Passió dUlldecona, el solemne Viacrucis de la Selva del Camp o la Processó del Diumenge de Rams de Tortosa són esdeveniments carregats de tradició.
Doncs bé, aquests turbes duniversitaris cridaners de la Gran Bretanya que es pixen per les cantonades i que gaudeixen dun estat constant dembriaguesa poden esdevenir també una nova tradició que enriquirà el nostre patrimoni turístic. El rotatiu madrileny El País ja albirava la potencialitat del macroesdeveniment en una impagable crònica de Mercè Pérez del dia 12 dabril de lany 2011:
«Me he bebido 25 copas entre cervezas, chupitos y ron, esto va a ser una maratón de alcohol». Lo decía ayer a medianoche Danie, un joven de 19 años que estudia empresariales y que apenas podía sostenerse en pie. Es uno de los 5.000 universitarios ingleses y escoceses que participan hasta el día 15 de abril en la décima edición del Saloufest, un evento que se promociona como un certamen deportivo entre universidades y que en su jornada inaugural desembocó en una juerga de alcohol por las calles de Salou. Daniel llegó a la Costa Dorada tras 24 horas de viaje en autobús y con una idea bien clara «¿Deportes? No, gracias, quiero fiestas, chicas y alcohol» [...] Le rodearon hasta altas horas de la madrugada manadas de universitarios disfrazados de trogloditas, marineros o enfermeras «Soy nadador, pero no tenemos equipo, así que vamos a estar todo el día en la playa y seguiremos bebiendo para no perder el ritmo, es el segundo año que vengo al Saloufest y es alucinante», afirmaba entre contorneos Nik Marsh, un estudiante de negocios de la universidad Portsmouth disfrazado de mimo. Otros, como James, estudiante de criminología de 20 años, no lo tendrán tan fácil. «A las 8 de la mañana tengo que despertarme para jugar un partido de futbol, y si no nos levantamos la organización nos llama por teléfono y nos obligan a salir de la cama, el año pasado nos dormíamos en el banquillo, íbamos a las competiciones borrachos y algunos incluso vomitaron». Para él, la clave del éxito de estas vacaciones es la permisividad: «Nosotros llevamos dinero y la ciudad nos lo permite todo, el interés es mutuo», afirmó divertido [...] A medianoche, la mayoría ya a medio vestir, hicieron un parón en algún restaurante de comida rápida. «El Saloufest es nuestro agosto adelantado, nos da igual que den mala imagen», explicó el empleado de uno de los locales. Hacia las dos de la madrugada, muchos deambulaban por las calles perdidos, buscando su hotel. Alguno incluso se dedicó a hacer carreras por la acera completamente desnudo o a saltar las paredes de las casas en busca de alguna piscina en la que colarse. A otros les habían robado el móvil o la cartera. Y la mayoría seguía con ganas de fiesta. «Cada noche terminamos desnudos bañándonos en la playa» comentó entre sorbos de vodka y vestida de bailarina de ballet Mary, de 19 años. Esta noche, los 5.000 universitarios de Saloufest volverán a disfrazarse y a tomar las calles de la ciudad de la Costa Daurada. «¡Esto es el paraíso!», acertó a gritar Mary mientras se alejaba dando tumbos.*
Llegint la crònica, hom coincideix al cent per cent amb la ràbia que ja va manifestar el regidor de Turisme de lAjuntament, Alberto del Hierro, quan va desmentir categòricament que el Saloufest fos turisme etílic. La pàgina web de lAjuntament de Salou del 10 de març de 2010 mostra aquesta perla: «parece que haya una mano negra detrás de todo ello que intente hacer daño a la buena labor que se está desarrollando desde el sector turístico de Salou». Además, ha recordado que desde hace seis años Salou cuenta con un sello de turismo familiar bien avalado y que «por suerte, hace muchos años que Salou ya no se asocia al turismo de borrachera».**
La malastrugança del recent Saloufest: una noia de 21 anys en estat molt greu després de caure del balcó dun quart pis de lhotel i loverbooking detectat en alguns dels establiments, pot trabucar els titànics esforços de ladministració local en consolidar aquesta referència del turisme de qualitat.
Sembla que el senyor Pere Granados, actual batlle de Salou, sha deixat influir per quatre notícies alarmistes i vol ara deslligar el nom de Salou de qualsevol relació amb la farra alcohòlica continuada de 15 anys. LAjuntament ha publicat un comunicat en què diu: El Ayuntamiento de Salou requiere en los hoteles que participan del paquete turístico que dejen de perjudicar la buena imagen turística del municipio y que cesen en el uso de la marca Salou.***
Potser ara caldria recordar a les nostres competents (sic) autoritats allò tan nostrat de qui no vol pols que no vagi a lera.
*http://sociedad.elpais.com/sociedad/2011/04/11/actualidad/1302472807_850215.html
**http://www.salou.cat/notespremsa_detall/_dUwgE6vd29Tm5OISSHwQvAGk2Vzb6BEBW6pVhEZyfGY
***http://ccaa.elpais.com/ccaa/2015/04/02/catalunya/1427981361_881393.html